9.30.2017

Frontera

*Exposición colectiva


Fernando ‘Coco’ Bedoya, Paulo Bruscky, Mariana Bunimov, Jorge Caraballo, Elda Cerrato, Emilio Chapela, Guillermo Deisler, Nicolás García Uriburu, Anna Bella Geiger, Rafael Hastings, Luis Hernández Mellizo, Alicia Herrero, Maurício Ianês, Leandro Katz, Jonier Marin, Juan José Olavarría, Horacio Zabala

Texto curatorial:
http://henriquefaria-ba.us9.list-manage.com/track/click?u=46b119e7f233aff8c5ed1b812&id=edcaa1e1de&e=de46e14327

9.20.2017

Auditorio primavera

*Acción colectiva

¿cómo supervive "un disco" cuando sus formatos físicos van mutando?
invitando a amigos a remixarlos

eso será el ciclo auditorio primavera

una noche sonora y reunión visual con la participación de referentes, artistas, músicos, escritores y djs.
cada invitado escogió un tema del disco mediodía de mi vida* y creó un nuevo remix/remezcla, derivando en otro sonido, en un vídeo, una imagen o en un texto... 
en vivo intervenciones back to back de la obra de cada artista y un gran baile final de cierre. 

participan:
gustavo nieto
alma laprida
alvaro cifuentes
eduardo ferrer
francisco di gianni
diego bianchi
agustín lobo
triana leborans
victor lopez zumelzu
leopoldo estol
matías tomás, 
gema calderó danna
federico carlorosi
luis hernández mellizo
andrés aizicovich
daniel edwin alva torres
héctor barreiro,
julieta tarraubella
dani nijenshon
ananké asseff
pola diaz mendilaharzu

*mediodía de mi vida rubén zerrizuela
presentado en fundación proa 12/2016 . © sonido es salud

escuchar/bajar:
https://soundcloud.com/dj-baywatch/sets/mediodia-de-mi-vida
algunos videos:
https://www.youtube.com/watch?v=bGWwf9-u7ZQ&t=2016s
https://www.youtube.com/watch?v=5zjk_-TgIkk
Auditorio Espacio Tucumán. Suipacha 140, CABA. Argentina


9.19.2017

Working Dead | Arte y trabajo

*Muestra colectiva



Inauguración: Jueves 21 de Septiembre de 2017. 19:30hs.
Museo Genaro Perez. Avenida General Paz 33.  Córdoba, Argentina

WORKING DEAD / ARTE Y TRABAJO 
CURADOR: GUSTAVO PIÑERO

SOBRE LA MUESTRA
Working Dead/Arte y Trabajo es una exhibición con obras y textos de artistas con visión crítica y compromiso sobre la situación del artista como trabajador. Andrés Aizicovich, Cotelito, Santiago Chierico, Lino Divas, Leon Ferrari, Pablo Guiot, Luis Hernandez Mellizo, Gumier Maier, Quinquela Martin, Paula Masarutti, Lucas Mercado, Angel Pacheco, Ricardo Pedroni, Gerardo Repetto, Revista Boba, Juan Carlos Romero y Mario Scorzelli bajo la curaduría de Gustavo Piñero.

Se reflexiona sobre la situación del productor cultural y las condiciones en las que se trabaja en las artes visuales, la flexibilización laboral y la pérdida del trabajo entre otros enfoques. Un conjunto de obras de diferentes materialidades, videos, dibujos, pinturas y dispositivos instalados, tienen su recorrido en las salas del primer piso del Genaro Pérez.

¿Es el arte un trabajo? ¿Cuáles son las condiciones en las que se desarrolla este trabajo? ¿Qué significa la profesionalización en las artes visuales?

El tema de la muestra es un punto de partida para preguntarnos sobre el rol que ocupa el arte en nuestra sociedad, cuál es su marco laboral desde las prácticas y como se vincula con el mundo del trabajo.



TEXTO CURATORIAL por Gustavo Piñero

Cualquier cuestionamiento surge de una tradición, de un dominio práctico o teórico de la ´herencia´ que está inscrita en la estructura misma del campo, como un ´estado de cosas, oculto por su propia evidencia, que delimita lo pensable y lo impensable y que abre el espacio de las preguntas y las respuestas posibles.
(Bourdieu, 2002:361)

En la secundaria iba a un colegio técnico[1]. En una oportunidad tuvimos que hacer una entrevista a un hombre que trabajaba la piedra, un picapedrero. El trabajo parecía simple, golpear con fuerza con un cincel y un martillo cada una de las piedras que llegaban a sus manos. Un golpe, dos golpes, tres golpes. La mano vibraba al ritmo de la fuerza que se descargaba sobre el material. El brazo vibraba. El hombro vibraba. Había un gesto en sus ojos. Su edad era de unos cincuenta años, pero estaba muy desmejorado.

¿Es el arte un trabajo? ¿Cuáles son las condiciones en las que trabajan los intelectuales de la cultura, en particular los artistas visuales? ¿Qué significa la profesionalización en las artes visuales?

Cuando se realiza una muestra, las personas que trabajan en un museo cobran por su trabajo. Las horas de productores, diseñadores, enmarcadores, montajistas, electricistas, sonidistas son pagadas. Sólo el artista no cobra por aportar el contenido.
Se presume que el capital simbólico que el artista acumula por la participación en dicha exposición es suficiente para cubrir su pago. ¿Y si el artista es alguien que trabaja con algo intangible? ¿Le sirve al artista este canje? ¿La espera entre la cantidad de presentaciones gratuitas y el momento de la supuesta recompensa tiene sentido?
Esta muestra reúne el trabajo de un grupo de artistas, algunos que hablan específicamente del artista como trabajador, otros, de la necesidad de colegiarse, de la falta de conciencia desde lo público y el compromiso con lo privado, del trabajo y la flexibilización laboral, de la pérdida del trabajo, entre diversos enfoques.
Creo muy valioso pensarlo desde acá, desde el museo pues, a decir de A. Fraser: ´Mi compromiso con la crítica institucional parte del hecho de que como artista y escritora las instituciones artísticas y académicas son los lugares donde se sitúa mi actividad…´

…Y la cabeza vibraba.

ANTECEDENTES TEÓRICOS
Entre los antecedentes previos para el desarrollo de esta muestra, se cuentan los debates de la Asociación de Artistas Visuales de Córdoba y la acción realizada en el Museo Caraffa el 13 del 12 del 2012 en donde se entregaban pequeños folletos que decían “¿sabe cuánto cobra un artista por su trabajo?”, la muestra Las buenas prácticas, en el Cepia curada por el grupo 10, la Revista Boba número 2, Artistas Organizados de Bs. As., el libro Es el arte un misterio o un ministerio y la Plataforma La Unión entre otras.

[1] E.N.E.T Nº 2, Ing. Carlos A Cassaffousth – Córdoba.




Nota de prensa 
http://www.ramona.org.ar/node/64210

Reseña en video de la muestra:
https://www.facebook.com/museo.genaroperez/videos/1455757071146525/

9.12.2017

$oporte. El uso del dinero como material en las artes visuales / $upport. Money as material in visual arts

*Publicación / Book publishing
Libro que referencia e ilustra algunas obras de LHM en el texto principal y en un ensayo anexo de Alvaro Cifuentes

Autor: Hernán Borisonik






























El paisaje en ruinas de nuestro presente parece inescrutable. Sin
embargo, este libro nos provee una nueva cartografía, a la que
acompaña de una pregunta política: ¿qué ocurriría si el texto cifrado
de nuestro tiempo no fuese sino legible a partir de un código
condensado en el dinero? A partir de allí, un criptoanálisis artístico de
los tiempos del capitalismo tardío se despliega implacable. La “era de
literalidad” parece moldear las formas según el dinero: todos los
objetos del mundo, cada uno de nuestros deseos más íntimos y, en
definitiva, el mundo mismo en su totalidad sufren una alquimia feroz
según el impulso de una reescritura monetaria de la vida. Si el dinero
es una obra de arte, ¿cuál es el espacio del arte en el mundo del capital?
En su estremecedora respuesta, este libro es a la vez un llamado, el
último llamado, para que el lector despierte, junto con el arte, a una
nueva política. / 
The ruined landscape of our present appears inscrutable. Nevertheless,
this book provides us with a new cartography, accompanied by a political
question: what would happen if the ciphered text of our time could only
be understood through a condensed monetary code? With this as the
starting point, an artistic cryptanalysis of the age of late capitalism
unfolds relentlessly. The “era of the literal” appears to shape forms
according to money: all the objects in the world, each one of our most
intimate desires and -in short- the entire world itself, suffer a fierce
alchemy according to the impulse of a monetary rewriting of life. If
money itself is a work of art, what is the place for art in the world of
money? With its disturbing answer to this question, this book is a call –
the final call – for the reader to awaken, alongside art, a new politics.


Fabián Ludueña Romandini


Edición bilingüe español inglés. 202 páginas color, 1ª edición agosto de 2017. ISBN: 978-84-16467-96-9. Formato 14,5 x 22,5 - Rústica. Colección Biblioteca de la Filosofía Venidera

El libro puede ser adquirido aquí:
http://www.minoydavila.com/oporte-el-uso-del-dinero-como-material-en-las-artes-visuales-upport-money-as-material-in-visual-arts.html
El libro puede ser consultado aquí:
https://www.academia.edu/34411526/_oporte._El_uso_del_dinero_como_material_en_las_artes_visuales_upport._Money_as_material_in_visual_arts

9.10.2017

Sobre (aún sin nombre) de Pablo Rosales

*Texto




Sobre (aún sin nombre) de Pablo Rosales

“El arte de la grandeza solo se logra con altura”
Anónimo


El artista visual a veces solo necesita de alguien que trascriba de manera coherente y técnicamente correcta una serie de ideas que piensa y logra verbalizar. Algún periodista o curador, por ejemplo, escucha e interpreta y ajusta un texto narrativo que da luces de esa obra visual.  Otros textos a veces son malas poesías, conjuntos de referencias históricas o filosóficas, o el intento de una versión escrita de lo visual a manera de “He reflexionado mucho”. A veces los anglicismos, las referencias astrológicas o el uso indiscriminado de los argots intentan darle un aire joven o único a las muestras por medio de sus textos.
En un contexto local con la casi ausencia total de critica a veces solo cansa la palabra y es preferible dejar las obras sin las palabras circundantes usuales y empieza a caber la pregunta de que si esa es la clase de textos que tenemos ¿Porque los necesitamos?, ¿Para que queremos buscar en lo escrito algo de inteligibilidad si no lo logramos en lo observado? La palabra Genio tan usada genérica e indiscriminadamente hace que una acción de sentido común sea aceptada como grandilocuente en contraste con un montón de no-genialidades porque son casi anónimas o indeterminadas, o simplemente porque alguien no las ve o registra. En donde no hay chispazos sino procesos de encuentro y sentido sí, bastaría con revisar las publicaciones de los artistas visuales en sus redes sociales para proyectar su conciencia del diseño de sí mismo y entender porque a veces es importante no ponerle palabras a algo.

Para su exposición (aún sin nombre) Pablo Rosales mas o menos tomo la decisión de que no iba a tener un texto. Este mismo que ahora lee es publicado solo en el cierre de la muestra, a manera de epitafio podría decirse porque aún lo no nominado, lo anónimo, el mudo o el desaparecido dicen algo.
La muestra consiste en una multitud de mascaras, para ser otro si se quiere, pero todos indiferenciados y pequeños. Son mascaras diseñadas a partir del recorte de una hoja de papel plegada, lo que le da una escala y simetría reconocible percibida como rostro; una pareidolia que se reproduce y se fija luego recortándose cuidadosamente en tablas de madera con huella vegetal que luego funcionan como planchas xilográficas para estampar papel y multiplicarse. Dispuestas sobre diez dispositivos verticales zigzagueantes de piso a techo esos rostros con ojos, nariz y boca parecen desposeídos, alguien sin nombre o el anónimo al que se le adjudica la cita propia de la sabiduría popular. Estructura, objeto-plancha y estampa conforman la intervención en la sala de exposiciones.
Hacerse un nombre como artista, autodenominarse así sin dudarlo y ganarse la vida como tal hacen parte de algunos de los parámetros con los que actualmente mediríamos su éxito.  Rosales sin mascara se reconoce de baja estatura, no emergente y no artista “genio”; por lo menos no en materia de reconocimiento, difusión y ventas. Pero sí vemos que el petizo de Rosales es un alto artista.

LHM Septiembre 2017

Agradecimientos a Estefania Mateo, Pablo Rosales y Benedetta Casini